martes, junio 08, 2010

¿Qué hacemos con la generación tapón?

En el caso español, el primer problema que tenemos que resolver es ¿qué hacer con nuestros padres, quienes han sido educados en una sociedad autoritaria que no respetaba ni los derechos humanos básicos, quienes han gozado de mejores condiciones laborales, aunque en su imaginario piensen que nosotros vivimos en un paraíso laboral (¡pobres!, cómo se autoengañan), quienes han ganado más dinero y comprado más propiedades (lo que ha encarecido el precio de la vivienda hasta precios abusivos, generando que los españoles, de media, no podamos emanciparnos hasta bien entrada la treintena), quienes van a vivir más años?

Casi toda la clase política, sindical, empresarial está okupada por ellas/os. Tienen entre cincuenta y tantos y setenta y tantos. Mandan en el funcionariado y la policía, en el ejército y las costumbres. A pesar de ser nuestros papás, tienen un adn predemocrático y no quieren ceder el poder ni a tiros. Su mundo, que desaparece día a día, nos ha condenado a ser sojuzgados, y ellos, consecuentemente, quieren ser eternamente jóvenes y vigorosos, aún robando la energía y el tiempo vital de sus cachorros. En muchos casos, las madres sesentonas se convierten en competidoras (también sexuales) de las jóvenes treintañeras. ¡Este es el triste panorama de nuestra generación!

Una vez resuelto ese dilema, nos tocará pensar qué hacer con nuestro destino. Pero no seremos dueños de nuestro futuro, mientras sigan ocupando el hueco que, se supone, estaba destinado a que eligiéramos nuestro modo de vida: "Todo esto será vuestro un día... por eso tengo cinco pisos, dos chalés y blablablabla..." En realidad, este argumento, por repetido, archimanido, no se sostiene. Su modo avaricioso de producir y acaparar nos ha condenado al trabajo precario e inestable, al acceso a precios prohibitivos a una vivienda en alquiler o a la condena a una hipoteca inflada. Es decir, nos han condenado a vivir a salto de mata, y encima usan la estrategia de culpabilizarnos a nosotras. ¡Es lo que hay!

La generación tapón es egoista, catolicona, poco leída, miope en el cuidado del medioambiente, reaccionaria en lo moral, incansable, glotona de todo lo que se le pone a tiro, tiránica a su modo, asocial y amargamente individualista, monoparental, mandona, analfabeta digital, contraria a cualquier forma de multiculturalismo y profundamente etnocéntrica, aun sin saber qué cojones sea el etnocentrismo.

Un morlaco que no tiene un pase, pero sí mucho peligro. Y en un mundo multipolar, son nuestra absurda joroba, lo que vuelve a desencajar el caso español del resto de la Europa avanzada.

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9 Comenta:

Blogger constanza dijo...

Te acuerdas de la fuga de Logan?

5:48 p. m.

 
Blogger jaime dijo...

me acuerdo de "gattaca": vuelvo a verla por ver a uma thurman, sobre todo: nuestra musa generacional, la de "beatiful girls", nuestra peli

11:55 a. m.

 
Blogger Comandante F. dijo...

Yo si me acuerdo de la fuga de Logan querido Constanza, pero la solucion del "Carrusel" me parece un poco drastica, no se, no se...

1:54 p. m.

 
Blogger Burne von der Quelle dijo...

Los altos niveles de ansiedad que sufre nuestra generación repercutirán en nuestra salud y, por tanto, en nuestra esperanza de vida.
Me da la impresión que muchos de nuestros padres nos van a enterrar. Pero, como dijo Epicuro, "la muerte, para nosotros, no es nada".

2:03 p. m.

 
Blogger constanza dijo...

Creo recordar que el corte estaba en los 30 años, con lo que nos coge un poco viejunos, pero a más de uno habría que ponerlo a dar vueltas en el carrusel.

2:04 p. m.

 
Blogger Unknown dijo...

En "la derrota del analfabetismo", querido vdQ, José Bergamín aseguraba que la universalización de la educación iba a acabar con el flamenco. Y así ha sido.

Siguiendo su lógica, tal vez tendríamos que empezar a colapsar/dinamitar los consultorios y hospitales de la seguridad social. Reventar farmacias como incendian sucursales bancarias o se queman cajeros automáticos en Euskadi, y alguna calle a tramano de Madrid.

En definitiva: imponer un terror blando para acabar con su dictadura.

2:18 p. m.

 
Blogger Unknown dijo...

Por supuesto, si montamos un sucedáneo de las Brigadas Rojas anti-sanitarias, el primer objetivo deben ser las clínicas de belleza estética, como clínica menorca, la del garrulo de mi pueblo, que está en la calle ibiza.

Si las madres (más bien pijas) sesentonas les birlan el noviete a las hijas treintañeras es porque tenían pasta para ponerse tetas de plástico, labios de poliester y estirarse la piel a base de liftings y adornársela con baños de rayos uva...

Formaríamos un comando un amazonas-pijas-vengadoras, que daría mucho juego en el telediario de las tres de la tarde. Más telegénicas que Josu Ternera, fijo.

3:55 p. m.

 
Blogger cabeçao dijo...

Lo malo de la Fuga de Logan es que la salvación estaba en un rollo cristiano catacúmbico con el pececillo y tó... Lo bueno es que tenían un carro que se cargaba con energía lunar (o lunática).
Como el Sufí, me quedo con Uma.. cantando por ND y bebiendo tequila... http://www.youtube.com/watch?v=cmwBYGrBsYU
Where it began, I can't begin to know when
But then I know it's growing strong... po pom pom!!!!
Nos vemos en unos días, shavalesssss

12:11 a. m.

 
Blogger Burne von der Quelle dijo...

Bueno, a ver si estamos sufriendo una especie de complejo de Edipo colectivo. Matar al padre para ocupar su lugar... La eterna lucha, que se remonta al albor de los tiempos, entre Lucke Skywalker y Darth Vader.
Lo cierto es que la infancia y juventud de nuestros padres transcurrió en los treinta años "gloriosos" del capitalismo. Ellos prosperaron y el ultraconservadurismo acabó inscrito en su ADN, aunque no lo supieran. Mamaron muchas películas de indios masacrados y vaqueros fascistas, de propaganda hollywoodiense de la sociedad de consumo en tonos pastel.
Ellos cogieron la ola ascendente. Y ahora a nosotros nos toca el batacazo en la arena (o, peor y más duro, en el cemento del hotel ilegal a pie de playa).

11:12 a. m.

 

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