lunes, julio 12, 2010

Financial World Games

La tentación de hablar del fútbol como inversión ideológica, como una cámara oscura que reflejara la realidad al revés: España gana al Deutsche Bank en semifinales y al Grupo ING (la cuenta naranja) en la final.

Pero no: habemus deudas, y pagar hay que pagarlas. Islandia nos queda lejos. (En España, quien protesta es linchado por todos: políticos, medios, ciudadanía anestesiada. Al solidario huelguista se lo ve como un criminal).

¡Ay! ¡Qué lástima que en el mundo de tiburones que nos devoran con su crisis no hubiese algún arbitraje por parte de la sociedad, no se sacara tarjeta roja, de vez en cuando, a los marrulleros y tramposos, a los amos de este chiringuito, aunque fuera con la tardanza y torpeza del colegiado Howard Webb!

4 Comenta:

Blogger jaime dijo...

Tendremos más de lo mismo de la misma ración. ¿No querías caldo...? Pues DOS tazones.

El refranero es sabio. Oye, al Borbón le queda poco (por las imágenes en tv)


haya salud!

6:25 p. m.

 
Blogger cabeçao dijo...

Joder, el Bribón está pal arrastre. Iba dopao hasta los ojos para aguantarse en pie. Por cierto, no he leído ningún comentario al respecto de su, por lo visto, degradado estado de salud. La ley del silencio real, como siempre, ¿no?

11:56 p. m.

 
Blogger jaime dijo...

Los fachas en sus tertulias de radio y televisión dicen que está chungo... y se oye la risa entre dientes.

La derecha pura y dura es antiborbónica, al menos, desde Isabel II. Por eso estaban tan a gusto con el Anterior...

1:33 p. m.

 
Blogger Unknown dijo...

De verdad que el borbonismo no está bien visto, me da. Les encanta el folleteo, dentro y fuera del matrimonio, lo que está muy bien siempre que no tengas que atender a un árbol dinástico. El suyo tiene más remiendos que el peluquín de el Dioni. Y eso la derechona lo ve...

En cambio, el republicanismo era a comienzos del siglo XX como una religión laica, ecuménica, se trataba de transmitir valores cívicos, y, por supuesto, hacerlo universalmente. Era un movimiento internacional, como el de los obreros en la Iª Internacional, que hoy, en la era de la globalización, paradójicamente, se ve como una reliquia... ¡y una utopía!

Hoy en España el republicanismo es anecdótico. Tampoco Obama o Sarkozy, dos presidentes de dos repúblicas importantes, tienen en su agenda transmitir esos valores de fraternidad. Lamentablemente.

El mundo se mueve en otra frecuencia política... más fragmentada. Pero, ¿cuál?

7:26 p. m.

 

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