3 por 1
El comercio en Madrid, y en toda España, está de capa caída. La última reforma laboral, que nos ha traído rebajas salariales y más paro, no augura los mejores tiempos para el sector: a menos renta, menos venta. En medio de la tormenta que nos trajo la crisis financiera y el pinchazo del ladrillo, con la acampada Sol instalada en el centro del debate político nacional y sus extensiones transnacionales -ocultadas por la prensa burguesa cuanto pueden-, la señora Aguirre ha movido ficha. Los nombramientos del ex consejero de Transportes, José Ignacio Echeverría, como presidente del parlamento madrileño, y el de Henríquez de Luna, imputado por el caso Becara, afluente del caso Guateque, por tráfico de influencias, como portavoz son señales inequívocas. Erre que erre.
Quienes denunciamos la deriva populista del PP no parece que nos equivocáramos. Según se extienden sus redes de poder, extieden sus lazos clientelistas y amordazan, aún más, la escasa libertad y democracia que padecemos. El gesto aguirrista, un guiño de la berlusconización que nos espera en todos los partidos constitucionales, es una señal a los cuatro vientos de que la ignorancia, la majeza, el mal temple, la corrupción y la venganza son valores a proteger por los peperos. Y claro que no nos representan, aunque dominen por teles, radios y prensa diaria casi todos los medios, con el inconfundible viento facha que nos ha traído la TDT. El TDT party celtibérico.
El otro día un amigo me dijo: "no sé a quién se le ocurrió el término neoliberal, pero es una ruina. A Esperanza Aguirre y su gobierno, como a los medios que la jalean, hay que llamarles por su nombre: fascistas. Lo contrario es hacernos un flaco favor".
La terminal fascista en la patronal del comercio madrileño se llama Arturo Fernández (en la foto). Este valido de la derecha ultra, se ha dedicado a amenazar y deslegitimar el movimiento 15-M como un vocero pepero al servicio de la chequera de Génova. Pero, en realidad, ¿a quién representa Arturo Fernández, qué asociaciones, cuántos afiliados tiene al corriente de cuota, qué subvenciones cobran por mantener el chiringuito para piquetear a los movimientos sociales? No conocemos un sólo tendero al que represente este señor. Autotitulado portavoz de los comerciantes.
La maraña madrileña, apuntalada en los resultados de las últimas elecciones municipales y autonómicas, son el adversario para toda aquella que quiera plantar cara al fascismo cotidiano, al que desprecia los órganos de representación y dinamita las asambleas populares.
De nuevo, se trata de vencer al fascismo. Setenta y pico años después.
Etiquetas: política
1 Comenta:
Arturo Fernández es dueño de arturocantoblanco.com, una empresa de catering que se está beneficiando con las concesiones de Esperanza Aguirre (por ejemplo, la de la creación de centros privados-concertados con suelo público de la Comunidad de Madrid)
4:48 p. m.
Publicar un comentario
<< Home