sábado, diciembre 27, 2008

inventario caprichoso

Se mira en el espejo del ascensor del hotel. El jersey de pico, la barba canosa, la calva reluciente. Decide quitarse las gafas, alisarse el pantalón, ceñirse los calcetines. Sus manos están sudando y un ligero temblor en la muñeca le obliga a guardar el paquetito con el regalo en el bolsillo del abrigo. E imagina qué pensaría Susana, si le viese en este instante, cuando el ascensor llega a la octava planta, las puertas se abren, él comienza a andar por la moqueta del pasillo, se mira fugazmente en un espejo, toca un aparador de madera cruzando los dedos, y se dirige a la habitación 809. Al extender su índice sobre el plástico liso del timbre se da cuenta con alivio de que ya no tiembla. Ahora un nudo se ha formado en su estómago y le muerde la duda de cuánto tardará en abrir la puerta.

Lleva sesenta días esperando una palabra de su contacto en Ceuta. Al atardecer, se acerca al cafetín, cerca del puerto, donde aguarda la palabra convenida. Se sienta en una silla de enea y pide un té. Habla con extraños, y si en una hora no ve a quien busca, vuelve al claro del bosque donde vive en una tienda de campaña. Come raíces, sobras de la basura y la leche en polvo de la Asistencia Social. Sesenta días tardó en recorrer el camino desde su aldea en Nigeria hasta Tetuán. Vio muchas cosas, unas agradables, pero la mayoría no. Vio morir degollada una mujer a las afueras de Yibuti, le robaron en una playa unos senegaleses, se emborrachó en Mauritania y a punto estuvo de morir aplastado por una rueda de camión. En sus ojos brilla una luz metálica, llena de esperanza. Aún no sabe que dentro de dos lunas morirá ahogado en el estrecho de Gibraltar.

Cuando despierta temprano, sobre su cama, tiene los diarios del día, el desayuno servido y el tocador listo para embadurnarse las arrugas. Siete criadas asisten su jornada. Nunca habla por teléfono. Sólo recibe en casa a las amigas íntimas. Su vida social se reduce a dos horas: de 15 a 17. No suele comer en compañía de extraños. París, últimamente, fatiga tanto sus nervios. La rutina se repite escrupulosamente desde hace décadas. Para la mujer más rica del mundo, según la revista Forbes, el dinero no existe: sabe que lo gana y se invierte, pero ni lo ve ni lo toca. Aquella mañana la colcha está revuelta. Ha tenido que coger el teléfono. Su secretario personal le acaba de dar detalles sobre un hombre que para ella, hasta el día de hoy, era un perfecto desconocido más en su agenda: Bernard L. Madoff. Esta mañana se siente ligeramente indispuesta, como si mantuviese el equilibrio encima de una ola de mar.

Bate los huevos para la tortilla. A mediodía se peleó con su compañera de trabajo porque no había hecho la tarea pendiente, y el superior culparía a ambas. No soportaba pensar en la injusticia que suponía que su compañera no fuese consciente del daño que podía hacerle gratuitamente. Es feliz, y como es simpática, cree que no puede llegar a ofender, pensaba para sí. En el automóvil, cerca de Parla, ha visto cómo un aguacero ha tronchado un árbol de cuajo. Las raíces salían de una fosa de tierra, como anémonas. Se ha roto una uña sacando las bolsas de plástico del maletero. Se ha quedado diez minutos encerrada en el ascensor, pero Ramón, un vecino, hablaba desde la escalerilla, lo que ha impedido que le diese un ataque de pánico. Ahora nota que le está subiendo la fiebre. Suena el teléfono, y oye su voz. Ha pensado que no era el mejor momento para decirle que van a tener un hijo.

En algún punto del horizonte, el joven que huye ve una sombra. Sus ojos azules recelan un instante. Un relámpago cae a lo lejos. Apenas se da cuenta de que sangra por un dedo del pie. Ha perdido los botones de la chaqueta de tela y le falta una manga. Va solo. Al principio de la huida, cada cruce de caminos era un pequeño calvario. No comió en tres días. Atravesó la frontera entre Austria y Alemania. Es un prófugo. De sus pupilas a veces caen lágrimas cuando se queda acurrucado, desvelado en medio de la noche. Las siguientes décadas el joven se dedicará al estudio y se entregará a la práctica de la fe. Aún no sabe que unos años más tarde, un diecinueve de abril, se asomará a un balcón en la Plaza de San Pedro de Roma como Jefe de la Cristiandad, y dirá: "Sólo soy un campesino de la viña del señor".

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viernes, diciembre 26, 2008

Pinter

jueves, diciembre 25, 2008

Choose me!

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miércoles, diciembre 24, 2008

Advertencia en CCS


lunes, diciembre 22, 2008

Hugo y Evo


Mi paso por CCS pretende retratar elementos que forman parte de la cotidianidad de esta ciudad. Objetos, gente, basura, pintadas, ruinas y sonrisas...es lo que queda en mi querida Caracas, que por cierto, ocupa el segundo lugar de un podium que lleva como título "los lugares más violentos del mundo".

Alta sociedad II


Paredes de Lavapiés



Mucsica tecno experimental en La Casa Invisible

domingo, diciembre 21, 2008

Postal navideña (con Kim)

Alta sociedad


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Nido de descontento

Amigo von der Quelle, ayer se reunieron algunos ciudadanos críticos, que la ola del día llama activistas, frente a la sede del Psoe en la calle Ferraz, para reclamar que no se criminalice absurdamente las descargas en la red para imponer un modelo único, el lecho de Procusto, de nuevo. No llegaron al medio centenar, pero son significativos. El ministerio de Cultura ha lanzado estas semanas de atrás una de sus campañas de publicidad, en esta caso criminalizando las descargas que dicen que dañan al mundo de lo que se ha venido en llamar alta cultura, aunque en ese saco hay de todo, y tal vez le cuadre más cultura tabulada o consagrada. Es una de las formas que adopta hoy la vieja querella entre saberes populares y sabiduría académica. También presente siempre en la creación literaria: la falta de esa tensión, o su vencimiento, es lo que hunde en mil devaneos formales la obra de Juan Ramón Jiménez, ineditable, como el equilibrio de esa tensión es el que vuelve aparentemente inmarchitable la obra de Antonio Machado y su prosa, cristalina. Los ejemplos, como fácilmente puede suponer, se multiplican y escoger a los elegidos es sólo una manera pedagógica de presentar las heridas, pese a que se me acuse de fatuo por nombrar en vano. Hoy día la cultura consagrada, como en cualquier tiempo, ha de mantener esa tensión, asimilar, previo debate, las posturas de las nuevas formas de la cultura popular para no fosilizarse, como a ese desarrollo que a través del software libre quiere rediseñar una plaza propia, la cultura libre, libre de las ataduras de los derechos de autor mal concebidos y la parafernalia de una industria que suele empobrecer los resultados artísticos y aniquilar su función reveladora, que hace polvo lo que toca, lo reduce a mensajes banales y lo lanza al estrellato para multiplicar millones de veces su eco. Ecos de ecos. Es la nueva caverna. El gesto de estos conjurados, sin embargo, es deformado por las elites culturales para no abrir ningún debate, sino menospreciar a los/las valientes que ponen en cuestión la cerca donde los poderosos guardan "sus" tesoros, que sólo podremos contemplar previo paso por taquilla.

Esta mañana el sol dora las ramas de los árboles, ya desnudas, y me entretengo leyendo una de las entradas de "La luz de una candela" (Anthropos), la última o tal vez penúltima entrega -ya sabe que no leo novedades, no puedo costeármelas- de los diarios de José Jiménez Lozano, que tampoco es fácilmente encasillable -¿cristiano impaciente?, ¿reaccionario (en el mejor sentido) compasivo?-, a quien tantos premios institucionales avalan. El caso es que sus apostillas provinciales no se acomodan por costumbre a las opiniones del circuito de la engreída -la mitad del éxito se encuentra en la pose- cultura tabulada o consagrada.

Escribe JJL: "Antonio Negri, ideólogo de las Brigadas Rojas, escribe hoy en la prensa que Europa no será otra cosa que un gran mercado para los grandes capitales, y un gran mercado de imágenes, que eliminarán el sabor de la vida, para el resto. ¡Claro! ¿Es que no estaba claro? "A menos -señala luego- que tenga lugar un gran despertar cultural y político." Pero más arriba había escrito que "nada nos prueba que la reconquista por parte de las masas de la participación política en la libertad sea posible". Y yo no lo sé. Lo que sé es que se están tomando todas la medidas, no para impedir "un despertador cultural", sino para asegurar la idiocia: desde la primera enseñanza -ya una ignorancia general básica- hasta las grandes teorías de cuño universitario sobre arte y literatura, sobre democracia y etc. El entierro de la memoria sobre todo y la no signficatividad del lenguaje: lo mismo es la palabra de la víctima que la del verdugo. Pero no hay que hacer muchas filosofías: en el zoco que es Europa de lo que se trata es de comprar y vender. Lo que siempre ha ocurrido, por otra parte. Lo único nuevo es que ahora, si se habla de erasmismo, pongamos por caso, lo mismo pueden darte un premio por sabio antiguo que ofrecerte calmantes o una sesión de psicoanálisis para que te tranquilices".

De momento, nuestra clase política y la industria cultural nos descalifican por medio de medias verdades orquestadas, pero pronto pueden dar el siguiente paso: crear su policía cibernética, sus cárceles de simulación, sus manicomios virtuales, para apartar, separar, todo lo que les molesta y desagrada, lo que no encaja en su lecho... para quedarse así, "con las manos libres para hacer su plan". Así se ha comportado siempre, me temo, von der Quelle, el gobernante déspota, amigo de sus amigos, donante descarado de favores. Y a usted le deseo que cumpla muchos más... en compañía de los suyos, desatento a las luchas en la red, nido de descontento.

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miércoles, diciembre 17, 2008

El guiño griego




Foto: Efe/ Orestis Panagiotou

Unos ingenuos, wilfrid, qué duda cabe. Unos ingenuos..., y que dure mucho. Ya le habrán llegado rumores, más raramente algún análisis, de lo que está pasando en Grecia. La muerte de Alexandros Grigoropoulos, un joven que contaba quince años, por un disparo de un policía fue el detonante de las revueltas juveniles, que han paralizado Grecia. La protesta se ha extendido, además de por buena parte del país de Antígona, a ciudades de Alemania, Inglaterra o España. Mientras la rebelión griega se ha organizado, aparentemente, sin asambleas ni protésis políticas, la respuesta en Madrid, Barcelona, París o Londres parece que ha partido desde grupos organizados que se movilizan contra el orden empresarial europeo y sus terminales político-mediáticas. La revuelta griega se ha dirigido contra un objetivo concreto: la policía y el parlamento. La revuelta griega ha hecho uso de los nuevos instrumentos de comunicación que favorecen la horizontalidad: mensajes sms desde teléfonos celulares y los contagios víricos de webs, blogs, redes sociales, foros y chats que favorece internet. Esta foto que ve, wilfrid, es de hoy mismo. Empleando el lenguaje universal de la iconografía retransmitida por los medios burgueses, formadores de mentes masivos, los jóvenes griegos se han subido a la Acrópolis y han colgado unas pancartas donde dan las gracias a los otros jóvenes de Europa por la reciprocidad. Un guiño. ¿Unos ingenuos? Sí, qué duda cabe, lejano amigo... Pero sin ingenuidad no habría ruptura de los rígidos mandatos ni alegría siquiera. Ellos pueden ser aún inocentes, e incluso, reclamar para sí el comentario nonchalance que dicen que dijo la cuentista danesa Isak Dinesen: "Me siento tan joven. Tengo veinticuatro siglos... y esta noche ceno con Sócrates", que ya sabe que era un tipo distraído y quisquilloso, que apenas salía de Atenas, y de los que prefería las calles y las plazas antes que los arroyos y los árboles, los caminos antes que los senderos y los gimnasios antes que los estadios. Que pase un buen día.

domingo, diciembre 14, 2008

Maqueta 1. V

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viernes, diciembre 05, 2008

De la Quinta del Buitre






Fíjese, wildrid, en el centro de mArtín vÁzquez (no era zurdo)... y la huguina. Por no hablar mucho de fútbol, lo que más me llama la atención del video, visto varias veces, es la cantidad de carteles publicitarios rudimentarios que hacen de parapeto con las gradas (algunos señores vivirían de ellos con sacrificio) frente a la monotonía tecnificada de hoy (uno que cliquea un ordenata y cobra por horas): los carteles: Pegaso, Soberano, Coca Cola, Mahou, Philips, Danone, KodakColor... Las cosas de los monos y de los pueblos, el tiempo que pasa...

...y quebrantos


lahaine

jueves, diciembre 04, 2008

Duelos



Matan a Uria... pero la partida continúa


Foto: Mitxi



El Congreso suspende el cóctel del Día de la Constitución por el atentado

La Gatonera

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lunes, diciembre 01, 2008

Chicho y la maría... en ¿Mientras el cuerpo aguante?

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